El presidente de Argentina, Mauricio Macri aseguró que 2017 será el año para las energías renovables en el país sudamericano. Enfatiza, que con las subastas en el sector eléctrico a realizarse en los próximos años, se llegará a la meta de que el 20% del consumo eléctrico venga de energías renovables en el año 2025.

En 2016 Argentina y su plan llamado “RenovAr” adjudicó, mediante licitación, 2,4GW de energía limpia entre 59 empresas buscando generar el 6% de la electricidad que consumen hoy en el país y cumpliendo con los compromisos adquiridos en campaña donde la diversificación de generación en energías limpias es tomada y administrada como una política de Estado. 

El decreto llamado, “Año de las Energías Renovables” y firmado por Macri, afirma que se debe incentivar “el aprovechamiento de los recursos energéticos renovables tanto para la generación de electricidad como para usos térmicos.” Destaca que este tipo limpio de obtener y generar energía tiene numerosos beneficios que incluyen, “en primer lugar, la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y otros gases nocivos que están asociados al uso de combustibles fósiles; en segundo lugar, la seguridad energética al no depender de otros países para el aprovisionamiento de energía; y por último, la creación de empleos locales calificados tanto para la instalación como para la fabricación de componentes y equipamiento, así como también para la provisión de servicios de mantenimiento.” 

 

Mejores mercados eléctricos en América Latina

México y Chile además de Brasil son los países con mayor fuerza en el mercado de inversionistas eléctricos sin dejar por fuera a Argentina que tuvo grandes mejoras durante el último año en materia de confianza tras el giro de timón que tomó su política.

Entendiendo el contexto económico argentino donde la nueva administración pretende sincerar su economía, Macri quiere eliminar subsidios a la energía y, hasta ahora, ha realizado dos subastas para proyectos de energías renovables. Por ley, Argentina debe obtener 8% de su suministro eléctrico de fuentes de energías naturales renovables no convencionales (ERNC) a partir de fines de 2017 aunque algunos son algo escépticos  considerando que la proporción actual de las energías renovables es de alrededor de 1%.

La inversión que planea la república es superior a los 4.000 millones de dólares en los próximos 5 años sólo para generar energía solar y de los cuales, cerca del 60% se destinarán a la construcción de  instalaciones para generación fotovoltaica, permitiendo crear cerca de 60.000 puestos de trabajo en todo el país según datos del sector y reseñados en medios argentinos.

 

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